lunes, noviembre 07, 2005

BIBLIOTECAS PÚBLICAS

Julio Ricardo Zuna Cossío

Las bibliotecas públicas no son sólo un lugar de acopio de libros, sino que también deben ser un sitio de consulta y un lugar de encuentro y creación cultural.

Lamentablemente, la municipalidad ha tenido siempre una mala política cultural. Es tiempo de evaluar la importancia de las bibliotecas públicas como impulsoras del desarrollo social y cultural, así como realizar un diagnóstico sobre la actual situación de los recintos bibliotecarios.

Falta definir orientaciones y pautas aplicables al sistema de bibliotecas públicas que se ajusten a las necesidades y los niveles de desarrollo nacional y local.

“Las bibliotecas públicas deben estar sujetas a reorganización y examen periódicos”, lo que implica eliminar elementos obsoletos, diseñar nuevos servicios e incorporar los avances tecnológicos.

Los siguientes factores son de vital importancia para mejorar en la brevedad posible si es que queremos tener bibliotecas modernas y aptas para un público cada vez más exigente.

1) La capacitación es un elemento básico en la transformación de habilidades del personal bibliotecario.
2) Es necesario un sistema de automatización de bibliotecas municipales para dejar atrás el obsoleto e impracticable sistema de catalogación que poseen actualmente.
3) También se vuelve necesaria la implantación de una biblioteca para discapacitados a fin de permitir el acceso a la información y la cultura.
4) Se deben incorporar recursos tecnológicos como la Internet y aplicaciones educativas que estén en formato multimedia.
5) Deben renovarse y actualizarse los libros, ya que en las bibliotecas nos encontramos con textos que ya han concluido su ciclo de vida útil y necesitan ser reemplazados, porque los parches no pueden más con el castigo del tiempo y el uso.
6) Crear políticas públicas de lectura o un plan departamental de fomento de la lectura.

Si se aplican los factores anteriormente mencionados, podremos evitar el colapso de las bibliotecas públicas, ya que es hora de que la municipalidad olvide el asunto partidario y comience con el potenciamiento, la actualización y la modernización de nuestras queridas bibliotecas.

Lunes 7 de Noviembre del 2005, Diario Mayor El Deber